Finde Nostálgico: Un vampiro poco corriente. Parte 1

Publicado originalmente el 17 de noviembre de 2008, por Araxis

Ya era tarde, y todo estaba tranquilo. O, al menos, eso era lo que parecía. Sin embargo, en una casa al fondo de la calle se iba a desarrollar una escena que sería crucial en el desarrollo de la Historia.

En esa casa vivía Alicia Gil. Todo el mundo pensaba que era una chica normal, a pesar de las pequeñas explosiones que se oían en su casa (los vecinos pensaban que hacía experimentos). Pero no era, precisamente, una chica normal. Más bien al contrario. Alicia Gil era una bruja. No era como se piensa que deben ser las brujas (vieja, gorda, antipática y con arrugas), sino que era joven, delgada y muy simpática. Pero, aquella noche, ocurriría algo por lo que dejaría de ser como acostumbraba.
Alrededor de las doce de la noche, algo irrumpió la tranquilidad que reinaba en la calle. Y digo algo, porque aquello no podía ser humano. Y no lo era. Hubo un tiempo en que fue humano, pero de eso hacía al menos 300 años. Ahora era un vampiro. Uno particularmente poderoso llamado Ángel. Los vampiros pueden aparecer con forma humana, pero Ángel irrumpió con forma de vampiro en la casa de Alicia.
Puede sonar extraño, ya que los vampiros solamente pueden entrar en una casa a la que han sido previamente invitados. Sin embargo, cabe explicar que él ya había estado en la casa.
El día anterior, a esa misma hora, llegó Ángel a la casa. Después de que Alicia abriera la puerta, Ángel le pidió que le dejara utilizar el teléfono, a lo que ella accedió, invitándole a entrar. Una vez dentro, Ángel llamó a un número inexistente y, al rato, le dio las gracias y se fue.
Ángel abrió de un golpe la puerta de la casa y entró en ella. Al oir el ruido, Alicia se acercó y, al verle, se quedó de piedra. Cuando era pequña, su madre le había contado historias sobre vampiros y otras criaturas extrañas, pero ella realmente no las había creído. Además, su madre había muerto cuando ella era pequeña, lo que ayudó a su escepticismo. Cuando salió de su estupor, Alicia intentó dirigirse hacia la cocina, pero Ángel la sujetó por los brazos, evitando que escapara.
-¿No reuerdas quién soy? -le preguntó a la chica.
-Eres el chico que ayer me pidió usar el teléfono.
-Yo me refiero a antes.
-¿Antes?
-Sí, antes. Hace exactamente doce años.
En ese momento, Alicia recordó. Hacía doce años que había muerto su madre. La noche anterior recordaba haber visto a alguien que llamó a la puerta, pidiendo por favor poder pasar al baño. También recordaba que ese hombre no entró hasta que su madre no le invitó a entrar. Después se fue. Al día siguiente, Alicia se había quedado a dormir en casa de una amiga, por lo que no pudo presenciar el asesinato de su madre.
-¡Tú! ¡Tú mataste a mi madre!
-Veo que te acuerdas.
En ese momento, y sin que Ángel pudiera evitarlo, Alicia se escurrió entre sus brazos y corrió escaleras arriba, hacia su habitación. Aunque Ángel la siguió, cuando llegó a la habitación Alicia sujetaba un libro y hablaba en un extraño idioma, el idioma de la magia.
Antes de que Ángel lo pudiera evitar, terminó de hablar y hubo un estallido de luz roja que a él le dejó inconsciente pero que a ella la mató.
Cuando Ángel recuperó la consciencia tuvo que huir rápidamente, ya que quedaba poco9 tiempo para el amanecer. Sin embargo, aunque intentaba pensar qué era lo que había ocurrido, no era capaz de averiguarlo. Pero poco tardó en descubrir que aquél estallido era parte de una maldición. Una maldición para vampiros que consumía la vida de quien lo decía para poder efectuarse. A cambio de su propia vida, Alicia hizo que Ángel obtuviera un alma. Ésto era lo que cambió la vida de Ángel, porque un vampiro con alma tien, en cierto modo, conciencia del bien y el mal y, por tanto, remordimientos en el caso de realizar una mala acción.