Querido Dick
Lo primero, no suelo recibir cartas que no van dirigidas a mí,
creo que el hecho de contestarle no supone que tenga un problema, ni que tenga que pedir
ayuda, sin embargo agradezco su consejo. Lo pensé mucho antes de realizar el
cometido, puesto que consideré que era bueno que supiera que aquí ya no vive
Beth, para así poder ahorrarle la agonía
de la espera de una respuesta y a su vez el evitar que me llegasen más sus
cartas.
Siento decirle que no sé qué ha sido de Beth. Cuando vine a
vivir aquí, la casera no me comentó nada al respecto ni yo tuve la curiosidad
de preguntar.
Si Beth no le avisó del cambio de domicilio, puede considerar la
opción de que lo haga en breve. La esperanza es lo último que se pierde.
Saludos cordiales.
Lidia
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Recuerda que en éste blog no están permitidos los enlaces de ningún tipo. Si en la moderación de los comentarios encontramos alguno, procederemos a borrar vuestra aportación.
Lamento la situación, pero la ley nos obliga.